Sigamos haciendo la diferencia

No podemos convertirnos en lo que siempre hemos criticado. Hacer la diferencia significa erradicar los vicios de los partidos de siempre

Jalisco es el escenario de un proceso de cambio político que encuentra valor en su origen: los ciudadanos. Gracias a este proceso, nuestro movimiento encontró las condiciones necesarias para llevar a los gobiernos locales y al Poder Legislativo, un proyecto distinto al de los viejos partidos.
Los ciudadanos decidieron darle una lección a quienes, se presumía, eran invencibles, y dejaron un mensaje muy claro en las urnas: quien no logre hacer un buen gobierno, se va. Este mensaje también está dirigido a nuestro Movimiento y es responsabilidad de todos los que formamos parte del mismo acatar el mandato de la gente.
En este contexto, Movimiento Ciudadano entró en una nueva etapa. Hoy contamos con la fracción más numerosa en el Congreso del Estado, una importante representación en el Congreso de la Unión, y somos gobierno en 24 municipios, en los cuales habita el 63 por ciento de la población de Jalisco.
Esta nueva etapa está acompañada de una gran responsabilidad: no repetir los errores que otras fuerzas políticas han cometido y siguen cometiendo. No podemos actuar como quienes, de forma irresponsable, han ocasionado que la política sea vista por muchos ciudadanos como algo ajeno, lejano y despreciable.
No podemos convertirnos en lo que siempre hemos criticado. Hacer la diferencia significa erradicar los vicios de los partidos de siempre, donde las únicas voces perceptibles son las de los actores de mayor relevancia, donde la divergencia se interpreta como falta de convicción o indisciplina, donde imperan la visión cortoplacista y los intereses personales, donde los ciudadanos sólo son tomados en cuenta durante los procesos electorales.
Nuestro Movimiento tiene la tarea de transformar la concepción de la política, demostrar que ésta no sólo se puede llevar a cabo desde los espacios del poder público, sino que se expresa a través de acciones cotidianas y que puede ser utilizada en beneficio de nuestras comunidades. Esto significa, como en tantas ocasiones ha señalado Enrique Alfaro, dignificar la política.
Es importante entender que en el camino se pueden cometer errores, que estos son parte de cualquier proceso de búsqueda y que cuando se aprende de ellos, nos ayudan a crecer. Por eso estamos obligados a detenernos para escuchar, recordar a dónde queremos ir y retomar el camino.
Sigamos adelante y construyamos algo de lo que nos podamos sentir orgullosos toda la vida. De lo contrario, habremos desperdiciado esta gran oportunidad de luchar por un mejor futuro para nuestras familias, nuestros amigos y, sobre todo, para aquellos que más lo necesitan.
Con ese ánimo nace este espacio, para buscar que el debate, la reflexión y la autocrítica nos ayuden a encontrar puntos en común; para no olvidar que gracias a la gente común, existe este proyecto; para contribuir, modestamente, a que en este movimiento sigamos haciendo la diferencia.
Leonardo F. Cosío es estudiante de Ciencia Política, participa en Movimiento Ciudadano desde el año 2012 y actualmente forma parte de la Dirección de Participación Ciudadana del Gobierno de Guadalajara.