TEPJF ordena a AMLO que no utilice su conferencia matutina como propaganda política
Al ras del inicio de las campañas electorales, rumbo a los comicios del 6 de junio de este 2021, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación aprobó criterios para la difusión de las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador, conocidas como “mañaneras”, y prohibió expresamente la difusión de propaganda gubernamental.
Las y los magistrados concluyeron que, de lo contrario, el mandatario, así como las concesionarias de radio y TV que difundan las mañaneras, corren el riesgo de violar el artículo 41 de la Constitución, que ordena suspender en periodo electoral la difusión en medios de propaganda gubernamental, tal como logros de gobierno, avances de desarrollo económico, social, cultural o político, o beneficios y compromisos cumplidos.
Tras establecer que durante las campañas electorales y hasta el día de la jornada electoral, los gobiernos y sus funcionarios tienen prohibido difundir propaganda gubernamental por cualquier medio o modalidad de comunicación social, la sentencia del TEPJF no prohíbe las mañaneras, pero, señala una serie de recomendaciones discursivas para que el presidente -así como cualquier funcionario público- no incurra en faltas a la Ley durante la emisión de las conferencias de prensa. Es decir, AMLO y todos los funcionarios deberán limitarse a presentar información institucional, no personalizada, y no deberá exaltar logros de gobierno y mucho menos influir en las preferencias electorales.
Estas conferencias de prensa en las que el jefe del Ejecutivo dice informar a la población, se han convertido en realidad en el principal y más poderoso sistema de propaganda política de López Obrador a favor de su proyecto -que incluye al partido Morena- a tal grado que, desde enero, el Instituto Nacional Electoral (INE) exigió al presidente que dejase de transmitir sus conferencias íntegras en este año electoral.
Los consejeros del INE consideraron que la rueda de prensa puede considerarse propaganda gubernamental porque el Gobierno presume sus logros, exhibe a periodistas críticos y ataca de forma directa a opositores. Incluso se le pidió a la Presidencia que aclarara pagos a reporteros que acuden a realizar preguntas afines al Gobierno. Casualmente, algunos de estos periodistas, en particular "youtubers" o "influencers” obtuvieron candidaturas para ser diputados federales.
Fue tal el escándalo generado por la inconformidad ante “las mañaneras” de López Obrador, con su mucho decir y poco hacer, que la escritora Elena Poniatowska, una de las seguidoras de mayor perfil de AMLO cuestionó la utilidad de éstas y reafirmó sus fines propagandísticos en una entrevista con el portal Índice Político: "Es un exceso del presidente López Obrador con tantas 'mañaneras', es un abuso del poder presidencial obligar a los periodistas que vayan todas las madrugadas a hacer preguntas a modo", expresó.
A estas exigencias de mantener neutralidad e imparcialidad en año electoral que se le hizo a principio de año, López Obrador hizo caso omiso. Esperemos que cumpla a cabalidad con el ordenamiento del Tribunal Electoral en el transcurso de las campañas, porque en la sentencia se advirtió que, tal como han sido hasta ahora, las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador sí tienen elementos de propaganda gubernamental indistinguibles de los aspectos meramente informativos.
