La incapacidad demostrada por los ‘servidores de la nación’ en la conservación y traslado de las vacunas, es un riesgo; son 8 estados que reportan recibirlas fuera de temperatura
Como si se tratara de una gripe común, así parece que toman las autoridades federales el manejo de las vacunas contra COVID-19, en México. La incapacidad que demuestran para dar el trato preciso y cuidadoso a las vacunas, hace dudar de la efectividad de las mismas. ¿Qué garantías dan a la ciudadanía con ese relajamiento de las medidas?
¿Qué no es suficiente conocer que vivimos toda una pandemia que todos los días nos deja muertos, para dar la orden de cumplir con un manejo estrictamente adecuado en las vacunas?
Hoy sabemos que a Tamaulipas llegó un lote de vacunas contra COVID-19 por arriba de la temperatura indicada, sin embargo, aunque el director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), Roy López Riadura, aceptó que así fue y no solamente ahí, también en Nuevo León y Oaxaca, para él, el tiempo y temperatura que salió de rango, no es suficiente para inactivar estas vacunas.
“En tres entidades federativas vimos alguna excursión de temperatura que fue en Nuevo León, Tamaulipas y Oaxaca, excursiones de temperatura que no llegaban a más de una hora por fuera del rango. Cuando suceden estos accidentes de red de frío, se reportan en las entidades, se revisan los datos y se dictamina si en efecto hubo un accidente que amerite anular esas vacunas y la decisión fue que no, que estos momentos de temperaturas no fueron suficientes en tiempo ni en intensidad como para inactivar la vacuna”, declaró el funcionario de salud.
Las temperaturas en las que estuvieron en estos tres estados, explicó López Riadura, pasaron entre 12 y 13 grados centígrados por menos de una hora, máximo dos horas, por ello, señaló que pueden utilizarse. De nuevo, no hay precisión.
Además, en Michoacán, Jalisco, Guanajuato, Coahuila, Campeche también reportaron vacunas que llegaron por arriba de la temperatura requerida.
Pero, ¿qué datos son los que revisan? ¿Por qué se da tolerancia? Mujeres y hombres acuden a la vacuna, la cual ven como última esperanza para recuperar una vida más normal, van y confían en que están protegidos ante el virus de COVID-19. Si aun así, sabemos que la efectividad de las vacunas no protege al cien en todos los casos, pues, una pérdida de efectividad en estos traslados y malos manejos, no nos pueden ayudar más que a cuestionar en manos de quién estamos dejando la salud.
Los estados tendrán que estar muy pendientes, exigir un manejo estrictamente adecuado y hacer valer el derecho a recibir las vacunas en tiempo y forma, con las indicaciones científicas requeridas, no menos.
