Luego de que se encontrara culpable por defraudación al Estado a la vicepresidenta argentina, el presidente López Obrador acusó al tribunal que dictó esta sentencia de ser manejado por la oligarquía y el conservadurismo.
El pasado miércoles un tribunal argentino encontró culpable a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner por asociación ilícita y defraudación al Estado.
🇦🇷 | URGENTE: Cristina Fernández ha sido hallada culpable y condenada a 6 años de cárcel además de la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. pic.twitter.com/AAhlptruUI
— Yannis Estrada (@YannisEst) December 6, 2022
Con esta sentencia, se castiga a la vicepresidenta con 6 años de cárcel y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Sin embargo, ella no irá a prisión debido a que cuenta con fuero político y además podrá apelar su condena ante la Corte Suprema, un proceso que podría demorar años.
Ante esta decisión del tribunal, el presidente AMLO ha condenado de antidemocrática la resolución pues, dijo, con esto se busca que no participe como candidata en las próximas elecciones presidenciales.
“¡Ah! Mi abrazo fraterno, mi solidaridad (para ella) y a todo el pueblo de Argentina (...) Hacen esto para que (ella) vaya de candidata y puedan decir ‘va a ser candidata una mujer acusada de corrupción’”.
Apoyo de AMLO hacia Fernández previo a la sentencia
Cabe destacar que a finales de agosto del 2022, López Obrador firmó una carta de respaldo a Fernández de Kirchner. En ese entonces, el presidente declaró que, aunque desconocía el proceso jurídico que enfrentaba la vicepresidenta, le resultaba evidente que la derecha estaba involucrada: “Es la forma de desacreditar”, afirmó en su momento.
Así mismo, señaló que situaciones similares se vivieron previamente en España, con el partido político Podemos, y en Brasil, con Lula da Silva. Incluso comparó este proceso con lo que vivió él mismo entre 2004 y 2005, al ser sometido a un juicio de desafuero, siendo jefe de Gobierno de la capital mexicana:
“No se le puede impedir a nadie que quiera participar en política solo por que se le fabrica un supuesto delito. Un poco lo que me hicieron a mí con el desafuero: que (Vicente) Fox no quería que yo apareciera en la boleta como candidato”.
Ante estas declaraciones, los conocidos argumentos obradoristas de “no me meto en eso” y “nosotros no vamos a juzgar en esos casos”, utilizados al ser cuestionado sobre temas de política exterior, parecen responder en realidad a los propios intereses de su particular agenda política.
Nuevamente, vemos cómo las preferencias de Andrés Manuel López Obrador se anteponen a la postura de la figura presidencial.
