Como “reportajes calumniosos” es que Andrés Manuel López Obrador califica el trabajo de la periodista Carmen Aristegui.
Las declaraciones de AMLO contra Carmen Aristegui dejan ver nuevamente la forma tan peculiar del presidente para responder ante la crítica a través de la descalificación:
“Conocí gente que veía en Carmen Aristegui el modelo de comunicación a seguir. La paladina de la libertad (...) era muy venerada. Sin embargo, a la hora de las definiciones, se fue, o así pensaba siempre, pero simulaba; está a favor del bloque conservador”.
“Todos estos reportajes calumniosos manejados por Carmen Aristegui, la señora esta Denise Dresser y el señor Aguayo, ese es su equipo, todos en contra”, aseguró López Obrador.
“Gritan como pregoneros cuando se trata de atacarnos y callan como momias cuando se trata de defender a la mafia del poder”, dijo el presidente sobre otras figuras del periodismo nacional.
Si AMLO arremete contra Aristegui, es porque busca dañar
Desde su programa de radio, Aristegui Noticias, la periodista Carmen Aristegui señaló lo inapropiadas y lastimosas que son estas declaraciones:
“Se ha referido a mí, otra vez, de manera muy agresiva. No parece percatarse el presidente de la república de que es eso, el presidente de la república. No parece percatarse de que detenta un poder enorme y que sus agresiones, porque eso son, y sus dichos que pretenden denostar la trayectoria, la credibilidad, el prestigio periodístico, los elementos que son fundamentales por lo menos para una periodista como yo”.
“Que el presidente de un país, en este caso el de México, decida usar los recursos públicos como el Palacio Nacional y su propio tiempo para agredir como lo hace, en este caso, me refiero a mi persona. Porque no puedo considerar de otra manera el asunto más que como una agresión, directamente del presidente de la república a mi persona, y me queda clarísimo, cada vez más, que el presidente dice cosas que tienen un solo propósito: dañar”, añadió la periodista al respecto.
Un presidente notablemente incómodo
Aunque este asunto de Andrés Manuel López Obrador contra el periodismo no es cosa de sorprender, el momento en que decide hacerlo nuevamente, de alguna manera, sí lo es. A meses de la consulta para su revocación de mandato, al presidente se le nota claramente incómodo.
Este asunto, sin duda alguna:
- Le ocupa
Debido al ejercicio democrático como tal. - Le preocupa
Aquello que este ejercicio arroje en cifras (no tanto en sí el resultado). - Le molesta
El hecho de no sentirse aceptado por todo “su pueblo”.
Conforme se vaya acercando la fecha, seguramente comenzaremos a ver cómo va intensificándose la incomodidad del macuspano. Al final, las mañaneras no son más que un ejercicio revelador sobre las posturas de nuestra actual figura presidencial.