A causa del confinamiento, trastornos como la anorexia, bulimia y vigorexia han aumentado, afectando a hombres y mujeres
La salud mental se ha visto afectada durante la pandemia del COVID-19, como consecuencia han aumentado los casos de depresión y ansiedad en muchos mexicanos y mexicanas, estas enfermedades vienen ligadas a trastornos alimenticios como la anorexia, bulimia, vigorexia o comer compulsivamente.
Los trastornos alimenticios afectan de forma muy grave la salud mental y física de las personas, durante el confinamiento se han desatado los casos en los que el paciente crea una mala relación con la comida: tener un acceso fácil y rápido a los alimentos, ingerirlos, sentir culpa que lleva a sentir ansiedad o depresión y de ahí se detona el trastorno.
A pesar de que estos trastornos aparecen normalmente durante la pubertad o la adultez temprana, entre los 12 y 17 años, se ha visto que están aumentando en personas de entre 20 y 30 años de edad, sobre todo la anorexia que afecta en mayor medida a mujeres y puede llegar al extremo de requerir hospitalización para salvar la vida del paciente.
De acuerdo con especialistas de la Universidad de Guadalajara, en México se presentan 22,000 casos de trastornos alimenticios cada año y para tratarlos es de suma importancia contar con ayuda psicológica, con un especialista en nutrición y, fundamentalmente, con el apoyo familiar. Por favor, si crees que padeces alguno de estos trastornos o conoces a alguien, anímate a pedir ayuda para salvar tu vida o la de tu ser querido.