Ante el corte rotatorio de agua, un grupo de vecinos de Zapopan se organizaron para mitigar los efectos de esta suspensión en la zona que habitan
Les faltaba agua, pero, les sobró unión. Con la compra de una cisterna y la habilitación de una más que consiguieron prestada, la solidaridad e iniciativa ciudadana se puso en marcha entre colonos de Zapopan Centro para mitigar los efectos del corte rotatorio de agua que tuvo que hacer el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) en varios puntos del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG).
Después de algunos días de afectación por la falta de agua, los vecinos decidieron buscar opciones para ayudar a mitigar en lo posible esta situación, se organizaron para comprar una cisterna y consiguieron una en préstamo, las colocaron en dos puntos estratégicos de la colonia y acordaron con el SIAPA que estos depósitos se mantuvieran llenos con ayuda de pipas. De esta forma, la gente ha podido acudir con cubetas, tambos y bidones para obtener el agua indispensable para cubrir sus necesidades básicas.
El presidente de la Asociación Vecinal de la Cabecera Municipal de Zapopan, Christian Castro Castro, informó que la respuesta de los vecinos ha sido muy favorable, incluso están por completar el recurso para comprar una cisterna más con la cooperación de todos, con lo que se podrá cubrir un punto estratégico más, con la idea de llegar a los cuatro lugares mejor ubicados de la colonia con este mismo esquema.
La compra de la cisterna se hizo con la aportación voluntaria de varias familias y el servicio es para los vecinos que lo requieren, sin ningún costo.
Aunque el suministro del agua se ha normalizado algunos días, estas medidas de cortes parciales de agua continuarán debido a que la Presa Calderón, que es de donde se surte principalmente este segmento del AMG, está prácticamente vacía y se tendrá que esperar a que el temporal de lluvias permita normalizar el abasto del vital líquido, por eso, el llamado es para cuidar el recurso, aprovechar al máximo su uso, ahorrar en lo posible y evitar su desperdicio.