En el 2021 fueron 9 periodistas quienes resultaron asesinados en México, mientras que, en menos de 2 meses, ya se suman 5 en el 2022.
La violencia contra periodistas ha resultado una constante en México en los últimos años, lo que lo hace ser el país más mortífero del mundo para la prensa.
Así mismo, entre 2011 y 2021, México es el país en donde se concentra el 42 % de los asesinatos de comunicadores en Latinoamérica, según un reporte realizado por la organización Reporteros sin Fronteras (RSF).
1/6 La Oficina de AmLatina de RSF publica hoy un informe inédito sobre los mecanismos de protección a periodistas, resultado de un exhaustivo trabajo de investigación y análisis en los cuatro países más peligrosos del continente para la prensa: México, Honduras, Colombia y Brasil
— RSF en español (@RSF_esp) February 22, 2022
Es importante mencionar que en este reporte no se incluye el caso de los 5 periodistas asesinados en lo que va de 2022:
- José Luis Gamboa, asesinado el 15 de enero en Veracruz.
- Margarito Martínez, asesinado el 17 de enero en Baja California.
- Lourdes Maldonado, asesinada el 23 de enero en Baja California.
- Roberto Toledo, asesinado el 31 de enero en Michoacán.
- Heber López, asesinado el 9 de febrero en Oaxaca.
Sin embargo, sí destaca el caso de la periodista Lourdes Maldonado, quien aún estando inscrita en el mecanismo de protección de periodistas, fue ejecutada en Tijuana, Baja California.
Además, este reporte asegura que las políticas públicas implementadas por parte del Gobierno mexicano no han sido suficientes. Por el contrario, los ataques a periodistas y defensores de los derechos humanos se agravaron con la entrada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia.
Violencia contra periodistas en América Latina
Durante la última década y según este reporte, en México, Brasil, Honduras y Colombia han ocurrido al menos 139 casos de asesinato de periodistas y comunicadores. En el 92 % de los casos fueron asesinados por sicarios profesionales y de manera premeditada.
Un denominador común entre estos países es que sus autoridades en los más altos niveles adoptan y promueven discursos estigmatizantes contra la prensa.
Por otra parte, además de asesinatos existen amenazas, secuestros y detenciones arbitrarias. Situaciones que propician escenarios nada favorables para las y los periodistas, incluyendo:
- Procedimientos judiciales abusivos.
- Actos de espionaje.
- Destrucción del material de trabajo.
La organización RSF resalta también que, de las 1,140 investigaciones iniciadas entre 2010 y 2018, solamente el 16.3 % terminó en procesos o juicios. De las 10 sentencias logradas de estos, 6 involucraron a un servidor público.
Por último, se señala que la gran mayoría de las víctimas cubrían noticias locales sobre corrupción, narcotráfico, violencia y seguridad pública.