Más de la mitad de las entidades en el país han empezado a implementar nuevas medidas que buscan no tener que cerrar los negocios y no afectar la economía.
México se encuentra enfrentando una nueva oleada de contagios de COVID-19 gracias a la variante ómicron y, a pesar de que el Gobierno federal no ha presentado ninguna estrategia, 17 de las 32 entidades del país han puesto nuevas medidas sanitarias para frenar el virus.
Jalisco, Tlaxcala, Tamaulipas, San Luis Potosí, Nuevo León, Baja California, Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Durango, Guanajuato, Hidalgo, Nayarit, Quintana Roo, Sinaloa y Zacatecas son algunos estados en los que se implementarán nuevos protocolos.
Todas las entidades coinciden en que buscan evitar el cierre de negocios con acciones a implementar como la reducción de aforos del 70 % al 50 % en transporte público y actividades recreativas; aplazar el regreso a clases presenciales; solicitar certificados de vacunación y acelerar la campaña para inocular al mayor número de personas.
Algunos estados también están poniendo a disposición más módulos de pruebas rápidas y los Gobiernos estatales están tratando de reforzar entre la ciudadanía las medidas sanitarias como el uso de cubrebocas y la distancia entre personas. En este punto es importante recalcar que, si se presentan síntomas, la cuarentena es vital.
En Jalisco se empezarán a aplicar las nuevas medidas a partir del viernes 14 de enero. En nuestro estado el regreso a clases presenciales será escalonado empezando con educación básica el 17 de enero; estudiantes de educación media superior será hasta el 31 de enero y para la U. de G. hasta el 8 de febrero.
Además, las y los jaliscienses deberán presentar su certificado de vacunación o prueba PCR negativa con 48 horas de vigencia para ciertas actividades recreativas como el ingreso a estadios.