El Degollado, símbolo de cultura y tradición

Este edificio es considerado como uno de los mejor conservados en toda Hispanoamérica y no es para menos, pues, a pesar de los años que pasan, el Degollado sigue conservando su belleza y su estilo neoclásico.

El Teatro Degollado suma más de 150 años de ser un símbolo para todo México. Está considerado entre los más emblemáticos de todo el país, junto con Bellas Artes.

Este recinto enmarca la Cruz de Plazas, en el Centro Histórico de Guadalajara, es custodiado por una de ellas: la Plaza de la Liberación, además de los Templos de San Agustín y Santa María de Gracia, dos de los recintos religiosos más antiguos de la ciudad.

Al igual que todos los edificios históricos de Guadalajara, el Teatro Degollado ha sido marco de varios sucesos, además, ha sido escenario de miles de eventos culturales de talla internacional.

Su construcción se inició en 1856, por el arquitecto Jacobo Gálvez. Fue inaugurado diez años después, el 13 de septiembre de 1866, con la ópera “Lucía di Lammermoor” de Gaetano Donizzetti y con la actuación de la soprano Ángela Peralta, conocida mundialmente como el “Ruiseñor Mexicano”.

Este edificio es considerado como uno de los mejor conservados en toda Hispanoamérica y no es para menos, pues, a pesar de los años que pasan, el Degollado sigue conservando su belleza y su estilo neoclásico.

Entrar a su sala, similar a la Scala de Milán, nos transporta a otra época. La elegancia de sus balcones, el espectacular escenario y los murales realizados por tres artistas jaliscienses, forman la imagen perfecta de este espacio icono de nuestro patrimonio nacional.

Quien lo ha visitado sabe que en este lugar solo se realizan actividades de alto nivel artístico de música, teatro, danza y multidisciplinaria. En la actualidad, es la sede oficial de la Orquesta Filarmónica de Jalisco.

Además, año con año, el Teatro Degollado y el Encuentro Internacional del Mariachi se fusionan para hacer la mancuerna perfecta, pues músicos de todo el mundo se unen en este lugar para llenarlo de folclor y recordarnos por qué Jalisco es México.