Los wikis replican viejas mañas y malas prácticas

Los “wikis” pronto perdieron su encanto y se convirtieron en aquello que juraron destruir. Al convertirse en el partido político Futuro, el movimiento, encabezado por José Pedro Kumamoto Aguilar, comenzó a replicar viejas prácticas políticas para hacer campaña al pagar, por ejemplo, por publicaciones que venden sus contenidos al mejor postor, también conocidos como “pasquines”.

Además, recientemente, los integrantes de Futuro ofrecieron una rueda de prensa en la que salieron a aclarar más casos de violencia sexual contra mujeres por parte de sus correligionarios, pero no admitieron cuestionamientos por parte de la prensa. De nuevo, exhibieron que lejos de ser una agrupación progresista y diferente, son un partido que utiliza las estrategias de antaño para hacer política.

Su escándalo más reciente fue la acusación de la precandidata Daniela Sánchez Bernal, quien contendió por el Distrito 6 en Zapopan y perdió. Sánchez Bernal, quien además es editorialista de un diario local, denunció en su columna de opinión del 22 de febrero, prácticas políticas sucias que se supone no deberían ocurrir en un partido que se dice distinto como, por ejemplo, el extravío de los videos de las votaciones, no haber utilizado urnas transparentes en la votación, no revelar el total de militantes que participaron en las elecciones internas y cacicazgo por parte Pedro Kumamoto.

“La primera vuelta de la elección, el domingo 14 de febrero en la que el partido decretó el empate, les pedí una revisión del video de las votaciones que tomaron vía Zoom, pues estaba convencida de que habíamos ganado; resulta que a pesar de que nos habían afirmado que el video existía, la grabación desapareció; a pesar de que ganamos 3 a 1 las elecciones presenciales, las votaciones vía Zoom desaparecieron”, expresó Sánchez en su columna del 22 de febrero titulada “Cuando crees en el ‘futuro’”.

“Creí en Futuro, en la opción que vive de la legitimidad que le otorga la diferencia, que se arma de la democracia y la pureza de ser ‘el partido nuevo", creí en Pedro Kumamoto”, añadió decepcionada la precandidata.

Así que, más que un partido distinto, Futuro parece ser uno en donde sus integrantes aprendieron viejas prácticas, de partidos antiguos y están dispuestos a continuarlas: compra de pasquines, no admitir preguntas en una “rueda de prensa” y procesos internos plagados de irregularidades.