Al presidente de México no le queda más que presumir logros que no son suyos para justificar su gobierno de cuarta
Presumir con sombrero ajeno ya se le está haciendo costumbre al señor presidente. La última de López Obrador fue resaltar en su tercer informe de gobierno el récord histórico de remesas como si fuera un logro de su administración, cuando la realidad es que su política migratoria es de cuarta.
Por supuesto, los migrantes no están nada contentos con estas declaraciones y con justa razón le mandaron a decir al mandatario a través de Carlos Arango, presidente del Frente Nacional de Inmigrantes en Estados Unidos, que:
“Es una vergüenza el querer exponer como un logro de su gobierno el envío de remesas cuando tiene desmantelada la red consular, sin servicio de pasaportes y sin recursos para la repatriación de cadáveres”.
Tal parece que AMLO no entiende que nuestros paisanos se han visto forzados a dejar el país por la falta de oportunidades laborales o para huir de la violencia que su administración no ha sabido resolver, es más, que ni le importa. Los migrantes mexicanos pasan grandes dificultades en el extranjero y el Gobierno federal se desentiende.
Además, AMLO ha promovido una política migratoria deplorable tanto para los migrantes mexicanos como para los centroamericanos y caribeños. El señor está de acuerdo con militarizar la frontera sur y golpear migrantes, como se le vio hacer a la Guardia Nacional hace unos días.
Las remesas enviadas a México, que en julio alcanzaron un récord de 4,540 millones de dólares, son gracias a las y los mexicanos que están trabajando arduamente por sacar adelante a sus familias. AMLO se ve más bonito calladito, ojalá deje de presumir logros que no son de él y se ponga a trabajar a favor de las y los mexicanos.
